1.1
Recostada, susurrando canciones,
dando vueltas en la cama.
Todo gira rápido, sin parar.
Fragmentos, instantes, ilusiones,
se detiene.
Vuelo alto, muy alto.
Cortan mis alas, aterrizaje forzado.
Utopías extintas.
Cielos, montañas, mares,
todo se junta para obstruirme el paso.
Susurros, susurros lejanos,
grillos, luciérnagas, patos,
cantan, ahuyan, gritan,
oídos sordos de tanto escuchar.
Llanto, risas, cólera,
la simpleza se hizo presente
me devuelve la sonrisa
me habla con las manos.
Envuelta en seda imaginaria,
con retazos de ilusión,
trocitos de nostalgia
desvanecidos por la lluvia.
Lluvia, llanto , lágrimas,
enero desolado,
marzo descontrolado,
septiembre de llovizna.
Pasa un año,
pasan dos,
sigo recostada
viendo pasar la vida,
sin fuerzas para enfrentarla.
Cobardía,
estoy llena de cobardía,
y de ilusiones y risas
y utopías.
Escribir,
mi único desahogo,
escribir hojas y hojas,
palabras, enunciados.
Susurros, susurros lejanos,
gritos desesperados,
fragmentos inhumanos,
noche abismal,
silencio,
ahora reina el silencio.
Grillos, luciérnagas, patos,
callados con brusquedad,
mientras un fantasma
rebota en la obscuridad.
Risas, risas, carcajadas
brotan de mi sin cesar.
Silencio,
silencio,
tengo sueño,
mis ojos se han cerrado ya.
1.2
Despierto,
las luciernagas han desaparecido
y los patos nadan en el estanque.
Han pasado unas horas,
o tal vez meses,
quiza años.
Tick, tack, tick, tack,
son las cinco en punto,
suena el timbre,
tardo en levantarme,
ya no hay nadie enla puerta.
El cafe se ha enfriado,
no hay tazas limpias,
comienza la limpieza,
adios polvo, telarañas y dudas,
olvidare fisuras,
ahora todo es transparente.
BETZY CELIS